(tarraconensis.com/ iberos/losiberos.html)
Tanto la red viaria como las viviendas se adaptaban
al terreno. El modelo de construcción más
difundido es el oppidum; fortificación
sobre una colina o elevación de fácil
defensa.
Los materiales empleados en la construcción
de una casa eran: la tierra, la piedra, la madera
y la cal. Las casas poseían un zócalo
de piedra de entre 0'5 y 1m de altura, sobre el
que se alzaban las paredes de adobe. Posteriormente
las piedras y adobes se revestían con barro,
se enlucían y se encalaban; e incluso algunas
casas se pintaron con tonos rojizos, verdes y
azulados.
Los suelos eran de tierra apisonada y raramente
de guijarros o lajas . Los techos eran planos
y consistían en un entramado de vigas y
rollizos sobre el que se disponía una densa
cubierta vegetal, se han documentado improntas
de tallos de gramíneas; y finalmente, se
le dotaba de una capa de arcilla o barro, a veces
mezclado con algún fragmento cerámico.
Las casas son de una sola planta y separadas
por muros medianeros, se organizaban en manzanas
y ocupaban, cada una, una superficie que variaba
entre los 80 y 150 m2, aunque la casa del jefe
del poblado seria la más grande llegando
a los 300m2.
La pendiente del cerro donde se situaba el poblado
obliga a nivelar el suelo de las habitaciones
mediante la construcción de muros de contención
que servían de base a las paredes y que
se rellenaban con tierra y piedras.
(tarraconensis.com/ iberos/losiberos.html)
|
|
Las habitaciones van así escalonándose
a lo largo de la cumbre y las puertas se abrían
en los lugares más accesibles, condicionando
la forma y la organización interna de las
casas. El poblado estaba casi siempre rodeado
de murallas y en ocasiones con torres adosadas.
Sus puertas tenían llaves para poder cerrarlas.
En cada vivienda el espacio se distribuía
de forma distinta, según las necesidades
y actividades de sus ocupantes, predominando el
modelo de una estancia principal y habitaciones
secundarias anexas, de menores dimensiones.
Las casas aparecen compartimentadas en habitaciones:
la zona principal, ocupa un lugar preferente y
concentra las actividades culinarias y textiles;
las despensas, en donde se almacenaban las ánforas
y tinajas, se sitúan en espacios apartados
y oscuros. Otras dependencias se destinan al reposo,
molienda o talleres.
El estudio de las estructuras excavadas muestra
la existencia de numerosas remodelaciones y ampliaciones
de las casas. Estas nuevas dependencias no se
comunican directamente con la vivienda original,
sino que los accesos se realizaban desde la calle.
Las manzanas de casas se disponían a uno
y otro lado de la gran calle central que recorrería
prácticamente todo el poblado. De este
eje principal arrancarían las calles secundarias
perpendiculares, cruzadas a su vez por otras,
con pequeñas plazas situadas en torno a
elementos destacados como una cisterna. Con el
paso del tiempo y la masificación las ampliaciones
en las viviendas fueron invadiendo y reduciendo
el espacio de las calles secundarias, salvo donde
era necesario mantener una anchura mínima
para la circulación de los carros, de tal
forma que se han encontrado calles donde sólo
era posible el paso de una persona.
(tarraconensis.com/ iberos/losiberos.html)
|
|
La miel era un producto utilizado desde la Antigüedad.
En los poblados ibéricos del Camp de Túria
(Valencia) son muy frecuentes las colmenas de cerámica
de forma cilíndrica y estriadas en su interior,
como las que proceden del Puntal dels Llops (Olocau,
el Camp de Túria) y de la Monravana y el
Tossal de Sant Miquel (Llíria, el Camp de
Túria).
Este tipo de colmenas, que se siguen empleando
en Grecia, Chipre, Egipto y Jordania, y, hasta
hace poco tiempo, en Mallorca y Andalucía,
era considerado por los tratadistas romanos como
de muy mala calidad, pues "se encienden con
los calores del estío y se hielan con los
fríos del invierno" (Columela, Agricultura,
IX, VI).
(tarraconensis.com/ iberos/losiberos.html)
|
|
La casa íbera se empieza con un cimiento,
que se rellena de cascajo. Una vez alcanzado el
nivel del suelo, se coloca unas primeras hiladas
de piedra que sirven de barrera horizontal para
la humedad. Sobre estas, se levantan las paredes
con adobe o tapial, cubriendo los dinteles de
puertas y ventanas con dinteles de madera. Las
casas son de un piso, habitualmente con dos crujías,
que se forman sobre vigas de madera. Sobre las
vigas, un entramado de madera fina sirve de soporte
para la cubierta, que se forma con hierbas y ramas,
impermeabilizando finalmente con una capa final
de arcilla.
( img: www.terra.es/personal3/balserar/restituciones.htm) |
|
Ver la casa ibicenca
Ver Los Iberos
|